domingo, 24 de mayo de 2015

¿Quiénes son nuestros Fundadores?

Las Hijas de Santa Luisa de Marillac en el Espíritu Santo son una Sociedad de Vida Apostólica fundada por Sor María Jeanet Úbeda Herrera y Sor Edith Priscila Jordán Pérez en 1992, en la Diócesis de Jinotega (Nicaragua). Ambas, siendo Hijas de la Caridad, sienten la necesidad de dar respuestas concretas a las necesidades de sus hermanos nicaragüenses más necesitados, especialmente en las regiones de conflictos y en el área campesina.


Así mismo inspirados por el Espíritu Santo y viendo la necesidad de fortalecer el trabajo ya iniciado desde hace 23 años, al servicio de los pobres, el 15 de agosto del 2015, Alexis Barquero Benavides con el apoyo y respaldo de Sor Jeaneth Ubeda Herrera y Sor Edith Priscila Jordán Pérez inicia con el proyecto de la Fundación de la Rama Masculina Hijos de Santa Luisa de Marillac en el Espíritu Santo, quienes hoy ejercen su apostolado en las Instalaciones de la Fundación Ángel de Amor, en la comunidad de la Rita de Pococí, Limón Costa Rica, ya que el mismo es parte de la Misión para la cual nace la Sociedad de Vida Apostólica. Hijas e Hijos de Santa Luisa de Marillac en el Espíritu Santo.
En el año 2018 la Rama Masculina empieza a dar frutos en la Diócesis de León, Nicaragua, en Chinandega donde se extiende la Rama Hijos de Santa Luisa de Marillac. Quienes hoy forman parte de la Familia Vicentina. 

Desde el 2015 La Rama Hijos de Santa Luisa de Marillac, CR se encuentra inscrita y Forma parte de la Familia Vicentina a Nivel internacional. 
Desde el 2019 a pedido del Padre Tomás forma parte del Consejo Nacional de la Familia Vicentina en Costa Rica, Así mismo forma parte del Consejo Nacional de la Familia Vicentina de Nicaragua.

      
Sor Marìa Jeaneth Ubeda Herrera


Alexis Barquero Benavides 


Sor Edith Priscila Jordán Pérez  

1 comentario:

  1. ¡Saludos!
    Gracias por prestar atención a mi aviso.
    Por su importancia, este aviso está subvencionado para que llegue a la persona adecuada.
    Soy Ana María, de Tarragona, almirante jubilada, en cuidados intensivos por enfermedad.
    Por esta enfermedad y por lo que revelan mis exámenes médicos, mi supervivencia es limitada.
    Al no tener familia, mi padre eclesiástico y guía espiritual me recomienda dar mi herencia para obtener el favor divino por las actividades en las que me he involucrado durante mi carrera.
    Para ello, deseo colocar a mi bichón Mila, que ha sido la alegría de mi vida durante los últimos años, con una familia, y una suma de 317.000 euros que, además de proporcionar los cuidados necesarios a Mila, se utilizará para ayudar a los niños pobres y a las personas sin hogar.
    Para ayudarme a cumplir esta misión, me gustaría pedir a quien esté interesado que se ponga en contacto conmigo por correo electrónico para mantener una conversación franca y honesta.
    Muchas gracias.
    anamariajulio38@gmail.com

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